Deulofeu: el crack anunciado

A sus 17 años, segundo de juvenil, ya pertenece al Barça B de Eusebio y ha debutado en el primer equipo de Guardiola

Llegó a los 9 al Barça en 2003, como Ronaldinho, la primera inspiración de un delantero que convive con la etiqueta de figura

Viendo el fútbol que atesora Gerard Deulofeu, su forma de encarar al rival, ese detalle de parar el reloj de repente con un frenazo brusco e inquietante previo al pase o a otro cambio de ritmo, no parece casual que su llegada al Barça coincidiera con la de Ronaldinho, en 2003. Entonces sólo tenía 9 años, pero ya hacía cosas diferentes, igual que ahora, con 17. Porque para hablar de 'Deulo', como le conocen sus compañeros, hay que partir de una premisa: es un jugador distinto, no tiene parangón, para bien y, hasta que controle algunos excesos futbolísticos, para mal.

Los que le vieron jugar en la Penya Esportiva Bons Aires, club que pertenecía al Girona, no lo dudaron. Aquel niño con tanto talento merecía una oportunidad en el Barça. Marcel y Maria Jesús, sus padres, aceptaron que comenzara a vivir su sueño lejos de Riudarenes (Girona), pequeña población de unos 1.500 habitantes.

Y desde sus primeros pasos en el Benjamín A de Félix Sánchez encontró la inspiración en la mejor versión de aquel brasileño risueño llamado Ronaldinho que aterrizó en el Barça de Rijkaard. "Sólo tenía ojos para Ronaldinho, era su ídolo", afirmó su padre hace un tiempo a MD. Pero al mismo tiempo que imitaba regates y diabluras, con su crecimiento muscular desarrolló una velocidad descomunal que le llevó de la media punta al extremo. Aunque es diestro, Fran Sánchez le colocaba por la izquierda a pierna cambiada en el infantil y el cadete.

Su explosión en los torneos de fútbol base más mediáticos le convirtió en un canterano famoso, una etiqueta que no es fácil de llevar en pleno proceso de madurez. El contrato con Nike y la llegada a su carrera de Ginés Carvajal, representante del madridista Raúl y de Víctor Valdés, confirmaron que todo el mundo estaba pendiente del futuro crack, que siempre ha demostrado su calidad en las categorías inferiores de la selección española, especialmente de la mano de uno de los entrenadores que más rendimiento sabe sacarle: Ginés Meléndez.

Con 16 años ya fue pieza clave en el Juvenil A de Òscar Garcia Junyent, con quien conquistó el triplete y superó ciertos tics de individualismo que amenazaban con lastrar su progresión. Siempre adelantado a su tiempo, Luis Enrique le hizo debutar con esa edad en el Barça B en Segunda División y Pep Guardiola ya le dio la alternativa, con 17 años, en el primer equipo el pasado 29 de octubre en el Barça-Mallorca de Liga.

Ahora le toca a Eusebio Sacristán pulirle en el filial. Es una joya en edad juvenil, como aquel Messi tímido que el técnico ya mimó junto a Rijkaard en su etapa en el primer equipo. Pero hay que seguir trabajando con él para que adquiera una mayor implicación defensiva en la presión al rival y para ayudarle a elegir mejor la finalización de sus acciones. Sabe que vive un momento único en la historia del club en el que los jóvenes tienen las puertas abiertas del primer equipo gracias a Pep Guardiola, pero siempre que combinen la calidad con la humildad, el desparpajo con la solidaridad, la diversión con el sacrificio. Deulofeu conoce el camino.

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