Contrato hasta 2014 y cláusula de 70 millones

El 9 de noviembre de 2011 Neymar renovaba de forma inesperada su contrato con el Santos, reduciendo un año su duración (en 2014 queda libre) y pasando a ser el jugador mejor pagado de Brasil (siete millones limpios entre sueldo y publicidad). A cambio, la cláusula de rescisión subió de 45 millones de euros a 70. Antes, el futbolista tenía el 70 por ciento de la publicidad que generaba. Tras la nenovación pasó a tener el 90%.

El mar de cifras continúa si se contempla la propiedad del jugador, que está dividida en tres partes fundamentales. El 55 por ciento de sus derechos pertenecen al Santos. Pero cuando se realice la venta, el 10% de ese 55% será para el jugador. El Grupo TEISA (también denominado GUIA) es poseedor del 5% de los derechos. Se los compró al Santos cuando el Chelsea estuvo a punto de llevárselo en 2009. Su agente Wagner Ribeiro y los dirigentes del Chelsea esperaban a Neymar en un hotel de Sao Paulo para firmar el traspaso, hasta que apareció este grupo (TEISA) formado por ocho importantes empresarios de la banca de Brasil (uno de ellos es el director del Santanter en aquel país) que convenció al padre para que se quedara y pusieron dinero quedándose con ese cinco por ciento. Su cláusula aumentó en ese momento de 35 a 45 millones de euros.

Hay otro potente grupo, Decir Sonda, que tiene el 40% de los derechos del jugador. Se trata de un conglomerado de empresas de alimentación que se metió hace unos años en el negocio del fútbol, cuya cabeza visible es Thiago Ferro, y que también tiene gran parte de los derechos de Ganso, la otra estrella del Santos.

Tribunales.
Luis Álvaro de Oliveira negoció con el Madrid (el acuerdo estaba cerrado por 58 millones) a espaldas de Delcir Sonda, que años atrás había comprado ese 40% al padre del jugador. El Santos no quiere pagarle su parte a Delcir, alegando que ya cobraron dinero de más por otras operaciones (Danilo, Ganso o Wesley). En cuanto el negocio se realice, con Madrid o Barcelona, Delcir Sonda llevará la operación a los tribunales, pero esto no repercutirá en el traspaso.