El último salto de La Masia

Sergi Roberto, uno de los destacados del cierre liguero del Barça en La Rosaleda, Marc Muniesa y Sergi Gómez tomaron ayer a última hora un vuelo con destino a Madrid para concentrarse con la Sub-19, que en los próximos días disputa el Pre-Europeo en Suiza; y a su regreso, Andreu Fontàs, Marc Bartra, Oriol Romeu y Carles Planas podrían estar preparándose ya para las otras dos grandes citas veraniegas de las selecciones inferiores: el Mundial Sub-20 de Colombia y la Eurocopa Sub-21 de Dinamarca. Era la última oportunidad para recordar juntos viejos y sobre todo buenos tiempos en la residencia donde crecieron y a la que pasarán a la historia por ser la última generación que ha pisado el Camp Nou. Pasan los años, 32, y el sueño de Fontàs, Bartra, Romeu, Planas, Roberto, Muniesa y Gómez es el mismo con el que entraron Esteve Fradera, Jordi Vinyals, Pep Boada y el fallecido Ángel Pedraza el 20 de octubre de 1979: triunfar en el primer equipo.

A todos les falta el último salto. Fontàs ya está en el aire. Cubrió la ausencia por enfermedad de Eric Abidal y en los últimos partidos ha cumplido con solvencia de central, de lateral izquierdo y de mediocentro, y ahora está a la espera de saber si Guardiola certifica su continuidad en el primer equipo la próxima campaña. Y los otros seis están tomando carrerilla desde el Mini, con Bartra y Roberto, después de lo visto en Málaga, en 'pole position'. A Muniesa y Romeu les toca ahora tomar las riendas del B; a Planas, consolidarse; y a Gómez, que este año ha alternado el filial y el Juvenil A, mantener el nivel con el que ha liderado la extraordinaria campaña de los de Òscar Garcia, con el triunfo en la Liga y la Copa de Campeones.

No caben todos

Guardiola está enamorado de ellos. Porque son buenos jugadores pero también, como él dice, porque son buena gente. Pero no caben todos, y lo saben. Cuatro son centrales. Planas tiene por delante a Abidal, Maxwell y Adriano. Y Roberto y Romeu deben hacerse un sitio entre el centro del campo campeón del mundo, con Cesc esperando en Londres y otro canterano, Thiago, exhibiendo en cada partido detalles de una calidad superlativa. Es el momento de la verdad. Las pruebas táctica y física ya las han superado, pero queda la más dura, la mental.

Pase lo que pase, su amistad es inquebrantable. Roberto, Muniesa y Gómez aún comparten piso y los otros cuatro han compartido litera en La Masia, que cerrará a lo grande. Con ocho canteranos en el 'once' de Wembley, siete llamando a la puerta y muchísimos más, los Deulofeu, Dongou, Grimaldo y cia., estrenando la nueva residencia en Sant Joan Despí soñando seguir sus pasos. El futuro es del Barça