sábado, 30 de abril de 2011
Un testarazo de Javi Guerra ejecuta al Barça B en el minuto 92
El Barça B, que jugaba con uno menos desde el 68¿ por la roja a Carmona, encajó su segunda derrota consecutiva de la manera más cruel posible por 2-1 frente a un Real Valladolid que demostró el porqué de su excelente racha. Y todo ello gracias a un gol de cabeza en el 92¿ de Javi Guerra, que ya suma 23, los mismos que Alex Geijo (Granada) y solo uno menos que el `Pichichi¿ Jonathan Soriano. Antes, en el minuto 59, el local Nauzet había enviado un penalti al poste.
El choque resultó vibrante y el equipo que dirige Luis Enrique se hizo acreedor a un empate que se esfumó en el último suspiro. Con Ilie como lateral derecho y Nolito en el banquillo, el Barça B tomó enseguida el control del partido, pero el Valladolid ocupaba muy bien los espacios y se estiraba con peligro, liderado por un Javi Guerra que suma nueve goles en los últimos nueve partidos.
A los tres minutos, Sisi cabeceó desviado un gran centro de Nauzet y en el 11¿ el blaugrana Benja no llegó a un magistral pase de Rafa Alcántara. El Valladolid seguía creando problemas en el juego aéreo y Javi Guerra cabeceó junto al poste en el 16¿. En un toma y daca, el colegiado Hernández Hernández señaló una inexistente mano de Edu Oriol en el minuto 17 cuando encaraba ya a Javi Jiménez (su disparo se topó con el larguero). El conjunto blaugrana volvió a rematar al travesaño en un potente disparo de Jonathan Soriano desde fuera del área y esta vez sí que era válido. Antes del descanso, Benja remató alto en una posición clara.
Tras el descanso, el Valladolid adelantó sus líneas y no tardó en encontrar su premio con un centro de Nauzet que permitió a Javi Guerra abrir el marcador al paso por el minuto 52. El conjunto local pudo sentenciar el envite en un riguroso penalti de Muniesa sobre Nauzet que el canario estrelló en el poste en el 58¿ y, solo cuatro minutos después, fue Marc Bartra el que cabeceó a gol un centro de Carmona.
El propio Carmona vio la segunda amarilla en el 69¿ y los de Abel Resino intensificaron su presión. Lejos de encerrarse, el filial siguió creando peligro y Abraham, Nolito y Benja, éste solo ante Javi Jiménez, pudieron marcar. Sin embargo, el gol fue local... un auténtico jarro de agua fría.
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