Será difícil que vuelvan a escuchar a Neymar debatirse entre el Madrid y el Barça. Ya ha tomado la decisión (aprobada por su padre y comunicada a su agente Ribeiro) de que irá al Madrid. Estos días se debate exclusivamente si su desembarco en Europa será en enero, tras la disputa del Mundial de Clubes (se ha cruzado la apuesta con su agente de que le marcará dos goles al Barça para ganarse al madridismo) o en julio de 2012 (tendría que firmar, en este caso, antes de la disputa de los Juegos Olímpicos). Cualquiera de las dos opciones será anunciada a principios de septiembre.
El Santos ya pelea únicamente la opción de que Neymar se quede, al menos, hasta el próximo verano. Retenerlo hasta el Mundialito de Clubes fue un éxito para el club peixe. Para disuadir a Neymar de su sueño europeo no dudaron en amenazar a Ribeiro con denunciar al Madrid a la FIFA si se hacía efectiva la cláusula de rescisión. El abogado del Santos iba a fundamentar dicha denuncia en dos aspectos: que el Brasileirao estaba en curso y eso le impediría salir con la cláusula (por eso Florentino presentó una oferta con el valor de la multa rescisoria) y que le quedan más de tres años de contrato (hasta 2015). "Por este mismo motivo Mexes estuvo un año sin jugar y la Roma sin fichar, porque hay algo que se llama 'periodo protegido", dicen en el Santos. "Sería fácil demostrar que el Madrid le indujo a pagar su cláusula (derecho que corresponde sólo al jugador). Bastaría con comprobar la procedencia del dinero".
Los plazos. Una vez terminado el Brasileirao (4 de diciembre) y tras el Mundial de Clubes (del 8 al 18 de diciembre) no habrá denuncia posible. El Santos trabaja intensamente estos días (según afirmaron altos directivos del club a AS) para igualarle a Neymar el sueldo del primer año en el Madrid y que se quede hasta agosto de 2012, participando así en la primera parte del Año del Centenario (empieza el 14 de abril). De paso, el presidente Luis Álvaro Ribeiro concurriría a las elecciones peixes a la presidencia (2 de diciembre) sin la losa de la marcha de Neymar.
El entorno del jugador ha decidido que se pronuncie durante los primeros días de septiembre. Las especulaciones sobre su futuro atenazan su juego y el Santos (que tantos esfuerzos para remunerarlo bien ha realizado) se está viendo afectado. El club peixe quería, de hecho, que se pronunciara a final de este mes. Pero la decisión de si viene en enero o en julio aún no está tomada.
Lo que sí está claro es el contrato que firmará con el Madrid: seis temporadas, con cinco millones de euros netos por cada una de ellas más el 50 por ciento de los derechos de imagen. Y se le respetarán todos los contratos publicitarios que tuviera firmados antes de ser del Madrid (ambas partes se repartirán al 50% los agregados de dichos contratos).
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